Águila se presentó en sociedad, en su casa, ante su afición, el rival, difícil como acostumbra, Isidro Metapán, vigente campeón nacional, llegó con las intenciones de conseguir algo más que un empate a tierras migueleñas, ante ese rival, al que por mucho, ha sometido a una paternidad casi absoluta y que ahora se encuentra en proceso de construcción, con nueva directiva y nuevos jugadores, pero con el deseo de resurgir de las cenizas.
Por segundo encuentro consecutivo, Águila sufrió una expulsión, al igual que como ya sucediera ante Santa Tecla, pero ésta vez, lo condicionaría durante casi 80 minutos de partido, demasiado tiempo para hacer frente a un rival mucho más rodado, mejor conjuntado y con una idea clara de a qué juega. En cambio el emplumado, aún en etapa de formación, le cuesta mucho trabajo la creación de juego en su mediocampo.
Sambulá presentó un once diferente, al que perdiera en la primera fecha ante Santa Tecla, con: Josué Coreas, Henry Romero, Anibal Parada, Ismael Rodriguez, Alvaro Lizama, Abraham Amaya, Ronald Torres, Rudy Batres, Isaac Zelaya, Jermaine Anderson, César Vásquez. Mientras que Jorge Rodríguez puso al mismo equipo que derrotara a Juventud Independiente el sábado anterior, con: Henry Hernández, Francisco Alvarez, Milton Molina, Jonathan Barrios, Julio Cerritos, Marvin Monterrosa, Héctor Mejía, José Peraza, Narciso Orellana, Andrés Flores, Héctor Ramos.
Encuentro de dos tiempos distintos, uno para cada equipo, el local intentó desde un inicio apretar en el mediocampo y siempre buscando como único referente en punta al jamaiquino Anderson. Se estrenó el mexicano Ismael Rodríguez en la zaga y demostró que su nivel de juego está por encima de lo esperado, seguro en marca por abajo y con muy buena salida de balón a ras de césped. Rudy Valencia, también se estrenó y fue quizá, junto a Isaac Zelaya, de lo mejorcito de Águila en una noche que de poco sirvió su esfuerzo pues el marcador final sería adverso.
Henry Romero, dejó diezmado a su equipo desde muy temprano, apenas se jugaba el minuto 17 cuando recibió su segunda tarjeta amarilla, pero aún y en desventaja, el emplumado sacó la garra y el orgullo propio y se mantuvo a flote durante la primera mitad a pesar de sufrir los ataques metapanecos que sostuvo el balón y la transición del mismo, era Aguila el que lo intentaba con poco más de peligro en las botas de Anderson, muy activo en la primera mitad pero nuevamente muy solitario en ataque. El local lograría la ventaja en el marcador, gol anotado por el debutante Ismael Rodríguez, con un cabezazo en un tiro libre cobrado por Lizama desde banda derecha, y que supondría un balde de agua fría para el calero que sonrojado se marchó al descanso con el gol en contra, a sabiendas que la ventaja numérica hasta ese momento, le perjudicaba más de lo que se supondría le favorecería.
La segunda mitad confirmó lo esperado, Metapán saldría a buscar el gol del empate, Águila sufrió sus ataques constantes y peligrosos, pero la defensa muy bien parada atrás se multiplicaba para destruir todas y cada una de sus posibilidades, el campeón no encontraba el gol, ni con empuje ni con fútbol, pero si lo consiguió gracias a errores puntuales de una -hasta entonces- muy bien aplicada zaga aguilucha. Nicolás Muñoz decretaría el empate transitorio, tras un error defensivo y ni el meta Josué Coreas pudo hacer más para evitarlo, se jugaba el minuto 71. Águila siguió intentando un contragolpe que le diera la ventaja, pero 6 minutos después un tiro raso cobrado por Milton Molina desde la entrada del área, superó la barrera y la estirada de Coreas para marcar el 1-2 favorable al visitante.
El resultado se volvió inevitable, Metapán logró en 6 minutos la ventaja necesaria para manejar el encuentro a su antojo, con un jugador menos transitó el balón como quiso, mientras Águila apostó a un error y un contragolpe certero en las botas de Anderson, pero nuevamente naufragó en sus intentos al ser absorbido por la férrea marca visitante. El encuentro moriría con esa tónica, Águila terminó rendido ante el cansancio de jugar casi todo el encuentro en inferioridad numérica y aunque falta confirmar su rendimiento con los 11 jugadores durante todo el encuentro, por ahora deberá pensar en el encuentro de este miércoles, ante Alianza, y por si fuera poco, también deberá comenzar a preocuparse por el último puesto que ocupa en la tabla acumulada, en el sótano que conduce al descenso.