Tuve la oportunidad de conocer y conversar con un grande e histórico personaje de nuestro fútbol: Óscar “Chelito” Gómez, ex-jugador del Excelsior, del Sonsonate, del Zacapa de Guatemala, y que ahora está radicado en Estados Unidos, pero que en una corta visita a nuestro país aceptó sentarse conmigo y hablar sobre este deporte que tantas pasiones despierta en nuestra tierra y en el mundo entero. Después de conocerlo y hablar con él, debo admitir, que nunca será lo mismo hablar de fútbol con alguien que vivió la época dorada, cuando el fútbol se jugaba con el corazón y cuando se vestía una camiseta con el honor y el deseo de defenderla. Para mí ha sido una enorme experiencia y desde acá le deseo muchos éxitos más a “Chelito”, esperando y deseando poder tomarnos un café en su próxima visita a El Salvador, para seguir hablando de este deporte que tantas alegrías nos da a nuestra vida. ABRAZO DE GOL!
¿Me gustaría que me hablara un poco, de su trayectoria, más bien cuando era niño, cómo supo que se dedicaría al fútbol?
Cuando yo nací el primer regalo que tuve fue una pelotita de fútbol, no era la reglamentaria sino que era una plástica, yo empecé a jugar desde muy niño, eso era lo que me fascinaba, Ir a la cancha, correr detrás de la pelota. Mis padres no tenían ni para comprarme un par de zapatos y en ese tiempo posiblemente yo lo hacía porque no había otra cosa que hacer. Fui creciendo poniéndome en mente que el fútbol era algo bonito. Yo nací en el Barrio San Miguelito, me llevaron a jugar al Barrio Belén y así comencé.
¿Qué ve usted de diferente en el momento en el que usted jugaba al fútbol a como se juega ahora?
Hay muchos cambios ahora, el fútbol lo han hecho más comercial, todo el mundo quiere ganar, y la verdad es que, cuando yo jugué, era más técnico, todo mundo se preocupaba porque tenía que tocar la pelota con las 2 piernas, ahora no, yo veo jugadores profesionales, no vayamos lejos, el mejor del mundo Messi, usa su pierna izquierda, pero la derecha ¿dónde la tiene? Solo le sirve para manejar el carro.
En el tiempo que yo jugaba, trataba todo el mudo de aprender con las dos piernas. A la gente le agradaba, ahora no, todo mundo tira el pelotazo y a correr, el que es más rápido es el que gana. Veo que ha venido en decadencia, no sé si serán los entrenadores o es el mismo jugador, o son los directivos que exigen al jugador a hacer las cosas diferentes. Porque ahora las directivas tienen mucho poder sobre el jugador, es un poco más de dinero que cobran. Es mucha la diferencia, pero respeto el futbol de ahora, lo felicito a todo aquel que quiera jugar y que está jugando y me duele mucho lo que ha pasado con los seleccionados, pero posiblemente ellos creen que la situación era muy mala para ellos y cometieron el error, nunca pensaron que el error iba a ser grave. Todo tiene un final y un comienzo. Creo yo que eso es una lección grande para todos y ojala que los juveniles no caigan en la misma para seguir adelante.
Hablando de la Selección, ¿cómo cree usted que se podría recuperar esa confianza que uno como aficionado, de alguna manera ha perdido en la Selección Nacional
Te digo que la Selección en sí, perdió todo, todo completamente, pero, el público en general se da cuenta, pero están castigados los muchachos y hay mucho juvenil que viene para arriba, lo único es que los directivos tienen que estar presentes, alimentarlos bien, para que los chicos no caigan en eso. Las directivas son un problema, hoy todo el mundo quiere ahorrarse un dólar y a la larga el que va a ser beneficiado es el club y el fútbol nacional, por eso el seleccionado nacional siempre va al fracaso, porque a veces traen unos extranjeros y no valen la pena. Ojalá y todo mejore.
¿Cree quizá que el proceso de formación del jugador ha decaído?
Posiblemente sí, aunque ahora, Atlético Marte, tiene uno de las mejores canteras, Juventud Independiente, anda más o menos también, porque tienen jugadores que vienen naciendo, no se los demás equipos porque yo estoy muy retirado de aquí, pero imagino que los demás equipos están preparándose en esa forma y sería bueno que los mismos entrenadores fueran a ver a los jugadores a los juveniles para que los aprieten y les digan qué es lo que necesitan y qué quieren de ellos.
Ojalá y se pongan las pilas y miren hacia abajo y vean que hay jugadores allí, estamos esperanzados que vengan los extranjeros, ganan más dinero y a veces son mas malos que el nacional, eso no es justo, pero los directivos, si les hablas bonito… Yo lo podía hacer, hablarle como un argentino, en portugués, yo podía hacerlo, hablar con todos ellos igual, pero yo soy nacional. A mí me trataban peor que al extranjero, aunque yo te digo que era muy rebelde (risas), yo mandaba a volar a cualquiera de los directivos. Yo era así y por eso tuve problemas con los entrenadores, pero hasta la vez estoy bien, me siento muy bien, me siento conforme con lo que hice.
Precisamente eso le iba a preguntar, en su trayectoria, ¿hay algo que usted desea haber logrado?
Fíjate que cuando Raúl Magaña agarró la Selección yo jugaba con Juventud Olímpica y en ese tiempo, yo y muchos jugadores, decían que el que debería estar en la Selección era yo, y sentía que sí, que si lo podía hacer. El tenía a Aparicio, Pelé Zapata, bueno, los que estaban en ese tiempo, pero por haber sido entrenador del Juventud Olímpica, y yo formaba parte de ese equipo, al haber tantos jugadores del mismo equipo en la Selección, por eso no me llamaron. Eso fue lo único que me molesto dentro de mi carrera.
“Chelito”, ¿de dónde proviene?
El “Chelito”, apareció porque era bien blanco y me decían “Chele”, pero en son de burla, a mi me daba risa, pero cuando yo llegué a Atlético Marte, con Don Carrasco Vivanco, un señor que me trató muy bien, pero en el equipo no había cupo para mí, porque tenía a “Pachín” González, Aparicio, Elenilson Franco, Sergio Méndez, Espinoza… en ese momento eran los que sonaban cuando yo aparecí, entonces, yo veía que si la hacía con él, y posiblemente yo lo hago mejor que cualquiera de ellos, lo único era que tenía que entrenar mejor. Eso era lo que yo pensaba.
Pero él me explicó y me mandó a reforzar al Excelsior de Santa Ana, subimos con ellos y me dijeron que me iban a dejar en el equipo, pero que me iban a seguir pagando lo mismo, yo les dije que no, que yo subía a la primera división y tenía que ganar más que lo que estaba ganando, me dijeron que no, porque iban a traer extranjeros, les dije “si los traen yo me voy, me dan mi carta y yo me voy”. Hicieron una carta y me corrían. Me fui y aparecí con Sonsonate. Para ellos fui algo grandioso, para el equipo, anduve bien, fui goleador con el equipo y de ahí me fui dando mi nombre y empezaron los apodos que nos decíamos, que eran pequeñitos, y a mí me decían “Chiqui”, “Chelito”, “el Chelito”, porque yo era chaparrito comparado a muchos defensas, comparado con mis demás compañeros del equipo tenía una estatura más o menos, no era ni el más bajito ni el más grande, era término medio y siempre me decían “Chelito” o “chiquito”, así apareció el apodo.
¿Jugaba de extremo?
Jugaba de extremo, me gustaba más el lado izquierdo aunque yo soy derecho.
Dentro las decisiones que ha tomado a lo largo de su vida, Usted emigró, fue a jugar a Guatemala y luego se fue a EEUU
Fui con el Deportivo Zacapa a Guatemala, pero ellos estaban igual que los equipos nacionales, el primer mes me pagaron exacto a la hora y el día, todo bien, el siguiente mes, se atrasaron 2 o 3 días, y el tercer mes me estaban pagando lo que me debían del mes anterior, ya se atrasaban mas y yo estaba corriendo y entrenando bien y les hable y les dije que si no me pagaban yo me largaba. Tengo que mantener a mi familia –les dije- no puedo darme el lujo de quedarme aquí, tengo hambre. Ellos creyeron que era mentira, agarre el carro y me vine de regreso a ES, llegando aquí, me llegó un Señor Cristiani, habló conmigo y me dice que tenía un equipo en Los Ángeles y que quería ver si yo quería jugar y que me iba a pagar bien, me explicó todo, y le dije que tenía que sacar visa, pasaporte… Al siguiente día fuimos, y luego me fui a Los Ángeles y me llevó al equipo “Los Angeles America”, y ahí empecé a jugar, yo encantado porque ganaba más de lo que ganaba aquí y no tenía que hacer gran cosa porque yo sentía que era más fácil jugar, quizá porque yo era muy habilidoso, muy rápido yo sentí que era más fácil. Jugaba contra Argentinos que nunca jugaron posiblemente, contra muchos Canadienses, gente que eran troncos completamente, no se podían mover y yo jugaba bien.
Pero luego me tuve que ir de California y me fui para Indiana, y ahí empecé a jugar otra vez, y las cosas fueron muy diferentes, ahí no era profesional, no era nada del otro mundo eran personas que trabajaban y tenían equipos y pagaban cualquier cosa pero te daban un trabajo. Me dieron un trabajo y me metí a jugar y me fue muy bien. La verdad, que a mí me han tratado muy bien acá y todo me fue de maravilla. Me he dedicado a entrenar equipos de niños, tengo un club que primero era Indiana Magic, se desarmó, ahora me moví y me ha contratado un club mexicano Los Ángeles Soccer Club y ahí estoy con ellos, me va muy bien, tengo poquito tiempo con ellos y están tratando la manera de darles charlas a los entrenadores para que se den a entender con los muchachos. Vamos a seguir adelante
¿Cuánto tiempo tiene de estar en EEUU
35 años. He salido, he llevado jugadores a Europa y tengo unos jugando en el Bucaresti (Rumania) y hay otro en Colorado Rápids, han sido mis alumnos, tengo muchos jugadores dentro de colegios muy grandes. Sigo cosechando triunfos. Cuando encuentro a alguien y me dice “Muchas gracias porque me entreno muy bien”, eso me llena de satisfacción. Me siento satisfecho, volviera a nacer volvería a ser el mismo, pero sería un poquitito más amable (risas).
¿Que añora de El Salvador?
Añoro, quizás muy poco te digo, porque siempre anduve en la calle, no fui de los fanáticos a las pupusas, a los tamales, trato de buscar algo que yo siento que va a hacer bien para mi cuerpo, lo que me dan verduras, frutas, con eso puedo vivir, no necesito carne, eso es lo que hago hoy me alimento a puras frutas. Hasta hoy que he venido a El Salvador estoy comiendo hamburguesas, carnes, comiendo mucha grasa (sonríe). Te digo que quizá añoro los amigos, los añoro bastante porque he tenido muchos amigos y siempre me hacen falta a pesar que hoy tengo muchas amistades en EEUU y una relación bastante buenas con todos. Soy feliz, tengo mis hijos, ya lo que tenía que hacer lo hice, ahora tengo un hobbie, seguir entrenando niños y colectando monedas de todo el mundo.
¿La Selecta de Playa?
Fenomenal. Porque los he visto y juegan buen fútbol, están bien dirigidos porque se ven muy bien. Cada vez que hay un torneo, prefiero verlo a ellos que ver al Barcelona o al Real Madrid, todo el mundo los ve. Veo aquí en El Salvador que todo mundo anda camisas del Barcelona y del Real Madrid, pero no cargamos la camiseta de nuestro país, eso para mí es, quizá bochornoso, que equipos de otros lados, de otro hemisferio vengan a triunfar aquí cuando tenemos elementos que podrían ser mejor que ellos y si no, mira lo que hizo el Mágico González, el tiempo que yo jugué, el jugaba, éramos amigos, y fui amigo de todos los “pachines” eran muchos y tenían su equipo, yo los admiraba.
¿Jugó contra el Mágico?
Si, el jugaba con Negocios Internacionales y yo para Sonsonate en ese tiempo.
¿Era bueno en la cancha?
Súper bueno, y te digo que lo admiraba mucho, pero no sólo a él, estaban los hermanos de él, eran muy buenos, era un fenómeno, yo no me puedo comparar con los “pachines”, mi respeto para ellos.
Hablamos de Atlético Marte. ¿No sé si sigue las ligas en este torneo?
Hay veces que se me hace difícil. Tal vez cuando hay juego yo también tengo juego o práctica con los niños y no me queda espacio. Primero tengo que cumplir con las obligaciones que tengo. Debo seguir tratando de hacer que los niños no anden en las calles, eso me da más satisfacción y posiblemente el próximo año si seguiré más el fútbol cuscatleco. Ojalá que todo salga mejor y que la gente vaya al estadio porque si alguien comete un error, no es culpa de los que se quedan. Vamos a apoyar a los que están, vienen un montón de muchachos nuevos.
De hecho la última convocatoria de Castillo, la base era de Atlético Marte y Firpo…
Marte tiene las bases muy bien dirigidas, lo mismo que Juventud, tienen muchos jóvenes y andan bien, no sé los otros equipos como están, me he ausentado un poco.
Para cerrar ¿a quien ve campeón en este torneo? Marte, FAS, Juventud Independiente, Metapán
Me gustaría que fuera Juventud, me gustaría porque he visto que los muchachos que tiene son más dedicados. Me gusta Marte y Juventud.
¿Esa sería la final?
Para mí, creo yo, y ojalá que no me equivoque.
Yo: “Fue un gusto hablar y conocer mucho más de fútbol con Usted”.
Chelito: “Cuando regrese nos tomamos un café y seguimos hablando de fútbol, tengo mucho qué contar… “
Nos despedimos con un gran abrazo.
