Tenia que suceder, tanto tiempo estando arriba y al maximo nivel tiene estas cosas, nada es eterno y el futbol no es la excepcion, como tampoco los jugadores quedan excentos de perder la frescura, entre partidos de liga, copa, champions y seleccion, un descalabro de tal magnitud tarde o temprano llegaria.
La ausencia de Tito ha afectado, aunque no lo queramos aceptar, el desastre se anunció allá por enero cuando el Barca salio a flote a tropezones, apelando al poderio ofensivo de Messi, a la circulacion de Xavi, el equilibrio de Busquets y a la lámpara de genio de Iniesta, asi nos mantuvimos bajo el mando de Roura que lo hizo tambien de la mejor manera pero todos sabiamos que algo no andaba como debia. No culpo a Tito, su enfermedad fue prioridad antes que el futbol y eso demuestra que en este club el factor humano vale mas que cualquier éxito o fracaso deportivo.
Más aún avisados, en el aspecto físico, no se gestionó la plantilla en la forma debida, los titularísimos no tuvieron la dosificación que si tuvieron en cambio los Bayern y Dortmund, se les exprimió y se les fundió y no se hizo nada para contrarrestar la pesadez de piernas y el cansancio mental, si se les dio descanso en partidos intrascendentes previo a los grandes encuentros de Champions, el Milan encendió la alarma y nos repusimos maestralmente, el PSG volvió a sacarnos las carencias en el Camp Nou, se clasificó gracias a goles de visita pero cierto es que en esa fase tampoco nos vimos bien y estuvimos cerca, demasiado quizá de bajarnos con anticipación del tren a Wembley.
El Bayern fue un rodillo, físicamente llegó fresco, renovado, en una perfecta condición física para hacerle frente a lo que preveíamos sería una auténtica batalla, pero solamente hubo un equipo en la cancha, el Barca se vio agotado, debilitado, con carreras y posesiones estériles, el bloque se vió mermado y falto de fuerzas, apelar a las individuales era la única salida para enderezar el barco pero éstas no aparecieron nunca, el Barca firmó quizá el peor encuentro que le hemos visto en los últimos años.
Un 4-0 que deja casi sin oportunidades de seguir soñando con la clasificación a la final, salvo una sinfonía magistral del Barca en la que aniquilen al Bayern y lo dejen sin opciones de gol podría pensarse en la clasificación, yo lo veo difícil más no imposible, pero si algo de diferencia hay es que este Barca jugó al 30%-50% de sus posibilidades y en el Camp Nou deberán hacerlo al 200%, esto significa no cometer los mismos errores del encuentro de ida, ser más intensos, presionar al Bayern en cada balón y anotar todas las que lleguen. Yo creo en el equipo y espero que clasifiquemos y remontemos, pero, caso contrario, aunque quedemos eliminados, el Barca debe vender cara su derrota y no volver a ser el mismo muñeco de trapo que el Bayern destrozó en Münich.