Aguila ha vuelto a sonreir y lo hizo frente al Alianza, al rival que siempre da gusto vencer, por la rivalidad deportiva existente, porque ambos no atravesaban se mejor momento, pero en esto del fútbol cualquier cosa puede suceder, y eso precisamente fue lo que hizo que este encuentro fuera de muy buen gusto de principio a fin.
Alianza se puso en ventaja en la primera mitad, pero no solo era mejor en el marcador, sino que por momentos logró tener encerrado al Aguila que no veía clara su salida, no tenía balón, no tenía posesión, perdía las marcas en la media cancha, y estaba practicamente ahogado, pero los albos no supieron traducir esta superioridad en el marcador durante la primera mitad.
Aguila volvió con una cara diferente, con ideas más frescas, con un Osael que atraviesa su mejor momento desde que inició la temporada y que poco a poco fue encontrando los espacios para llevar peligro a la meta blanca, que también perdió precisión y perdió la posesión de la pelota, Aguila ya bien se sabe, realiza muy buenos contragolpes, pero en esta segunda mitad, el conjunto aguilucho se aplicó en defensa, la media cancha se creció y adelante fueron letales, en 2 minutos le dieron la vuelta Jonathan Aguila y Nicolás Muñoz, de ahí en mas los albos desaparecieron y solamente intentaban llevar peligro con pelotazos que eran bien controlados por la defensa aguilucha
El tercer gol fue cortesía de Shawn Martin que había ingreado de cambio y que cerró este encuentro con un magnífico juego para el Aguila que acrecentó aún más la mala racha de resultado que el equipo albo está atravesando.