UNA OPINIÓN DE JAIME VÁSQUEZ. Recientemente los jugadores convocados a selección decidieron suspender los entrenamientos del microciclo que se llevaría a cabo los días lunes y martes como preparación para el partido contra México el próximo 13 de noviembre.
Los motivos de la suspensión son diversos, entre los cuales se pueden mencionar: hoteles de cuatro estrellas para concentrarse, incentivos monetarios, mejor transporte, entre otros, esto es calificado por los mismos jugadores como “necesidades básicas”. A esto surge la interrogante ¿en verdad son necesidad básicas o caprichos de los seleccionados?
Cuando era pequeño me enseñaron que si quería algo, debía hacer méritos para ganármelos y obtenerlos; y si aplicamos lo anterior a la selección surgen más interrogantes: ¿En verdad han realizado los méritos para pedir cosas tan extremas?
Resultados pobres con selecciones a quien desde antes de enfrentarlos ya dicen ganarles, empates con selecciones similares a nuestro juego, partidos perdidos frente a otros a quien muchos dicen que por ley debemos ganarles. Así ha sido el desempeño de la selección en los últimos partidos, ¿de verdad estos son méritos para…?
Si los jugadores de la selección mayor de fútbol creen no tener las condiciones necesarias, y que por eso no rinden, deberían ver hacia otros lados, como por ejemplo la selección de playa, que sin contar con mayores recursos han logrado mayores triunfos; o chicos que en otros deportes se están formando, pero que su deseo de competir y lograr destacar para su país, los han hecho ir contra la corriente.
Hay que poner los pies sobre la tierra señores jugadores, cuando en verdad obtengan la gloria en el futbol pueden pensar en exigir lo que se merecen.
Conste, tampoco estoy de parte de los federativos, que son los encargados de velar por el fútbol del país, pero después de dos días de haber transcurrido esta problemática, poco y nada han hecho para solucionar las cosas.
Somos muchos los que nos alegramos cuando nos hacen creer que las problemáticas del fútbol salvadoreño, pero sobretodo de la selección nacional, están resueltos, un ejemplo claro es el tema de amaños, muchos volvimos a soñar con ver una nueva selección, una nueva generación de jugadores, con una mejor mentalidad, mayor carácter, jugadores que iban a adquirir una responsabilidad por el país; pero también con una nueva administración de la FESFUT, que demostrará más orden y capacidad para manejar las riendas del futbol.
De alegría y sueños, volvemos nuevamente a caer en lo mismo, penas, decepciones, y ver como pesa el interés monetario y comodidades que el amor a un país, a una camiseta, a una afición, que en cada partido los acompaña incondicionalmente.
Si los seleccionados ni los federativos quieren resolver esta mal llamada ‘huelga’, sea el técnico Maradiaga quien tome las riendas para una pronta solución, llamando a jugadores que en verdad se jueguen todo por el país, que sean responsables, y sobretodo que tengan los pies en la tierra.
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