La final del Mundial de Fútbol femenino disputada el pasado domingo en Canadá y que enfrentó a las selecciones de Estados Unidos y Japón, se convirtió en el partido de fútbol más visto de la historia de la televisión estadounidense.
Un total de 26,7 millones de personas se sentaron frente a la pequeña pantalla para ver el encuentro, en el que EE.UU. logró su tercer Mundial femenino gracias a su victoria frente a las jugadoras niponas por 5-2.
Según las cifras de audiencia, unos 25,4 millones de espectadores siguieron el duelo por el canal Fox Sports, mientras que 1,27 millones de espectadores lo vieron en español en Telemundo.
En comparación, el año pasado 26,5 millones de personas siguieron la final del Mundial de fútbol de Brasil, que enfrentó a Argentina y Alemania.
Según destaca desde Los Ángeles el periodista de BBC Mundo Jaime González, la audiencia de la final del Mundial femenino de fútbol superó incluso a la que registraron en junio pasado los dos últimos partidos de la final de la liga de baloncesto de la NBA, que enfrentó a los Golden State Warriors y a los Cavalliers, que fueron seguidos por una media de unos 23 millones de espectadores.
La estrella del encuentro disputado el pasado domingo en Vacouver fue sin duda la delantera Carli Lloyd que, con un triplete -uno de ellos un golazo desde mitad del campo- encarriló la victoria para su equipo.
(BBC)