TEHABLODEFUTBOL.COM/ La Selecta afrontó su encuentro amistoso ante Panamá con la mirada fija en la eliminatoria mundialista. Más que un encuentro de preparación, el duelo ante los canaleros debería servir para afinar la maquinaria, engrasar los pistones y prepararse a los decisivos duelos que nos podrían definir la salida rápida o el inicio de un camino posible hacia una clasificación.
Demasiado pobre lo de la Selecta, a quien le faltó lo de siempre, la definición y también se quedó huérfano de creación, carente de idea al frente y aferrados a lo que Rugamas pudiera hacer entre las torres defensivas.
Para los de siempre, este resultado no es para evaluar ni rendimiento ni las formas, pero para quienes seguimos martillando hasta el hartazgo, el cansancio de ver mediocres jugadores en una mediocre selección jugando de lo peor que se puede ver, si viene a caer con su propio peso en la misma forma como si este fuera un partido oficial, hay cosas que simplemente no se pueden obviar.
Quizá otros pensarán que es cierto, que no se puede pedir mucho en amistosos, pero si esto no sirve de correctivo, ni tampoco en los oficiales entonces mejor apaguemos, vámonos y que no se hable más del deseo de mejora en la Selección.
Panamá nos desnudó toditas las carencias, y aunque por momentos hubo apuesta, como las de Rugamas, que las volvió a fallar cantadas, con dos llegadas falladas no se ganan partidos, se ganan con goles, y si en un tiro de esquina, tres jugadores pierden su posición para ir a cubrir a un solo rival, algo más pasa, y no es ni culpa del técnico ni de lejos, también el jugador tiene su responsabilidad. Son cosas de formación, de preparación, preceptos y principios que adquirís cuando comenzás a jugar al fútbol.
Pero bien. Panamá nos venció bien y sin tanto esfuerzo, por la mínima pero siendo superior y de eso es de donde se debe partir, pero quizás tampoco el tiempo nos dé para tanto.
Como les dije la vez anterior, nuestro destino ya está trazado y soy de la idea que no llegamos a la siguiente fase, ojalá y me equivoque.