TEHABLODEFUTBOL.COM / La Juve no podía romper el 0-0, tampoco el Nápoli ofrecía mejores argumentos, pero en la igualdad salió el espigado número 7 y con un zapatazo que rozó a un defensor napolitano, la Juve lograba sobre el final del encuentro, una victoria que lo deja como líder solitario del Calcio.
El encuentro, que pintaba espectáculo, terminó de decepcionar ante la poca llegada. Un guion de pizarra, de táctica, de esmero y de lucha. Los balones peleados en cada centímetro del terreno de juego, mientras, la defensa y el escudo se apersonaban para destruir el armamento bélico del rival.
Ni Juve ni Napoli tuvieron un partido cómodo. Los dos punteros se enfrascaron en una lucha estudiada, con más análisis frío que con la calidez de la sangre por la búsqueda de la emoción. Así, el encuentro anunciaba un amargo empate sin goles.
Pero tras una cabalgada de Pogba que terminó con un remate abierto y con los extremos y dos delantero esperando su asistencia, la última jugada para la Juve terminó por desquiciar a Reyna ya los suyos. Zaza encontró un balón en la entrada del área, y tras pensarlo y acomodarse, sacó un zurdazo que se desvió en Albiol y descolocó a Reyna, quien ya se estiraba al palo izquierdo. El balón pasó casi besando la mano de Reyna pero prosiguió su camino de gol.
Era el 1-0, la ventaja, sobre el final, cuando el encuentro moría. La Juve bajaba al Nápoli.
El Juventus Arena vibró, el banquillo entero saltó a la cancha a celebrar el único gol, ese que significaba el liderato y la victoria que el sustituto de Morata le regaló.
La Juve es hoy, el único líder en la Serie A.