El técnico portugués se ha caracterizado a lo largo de su carrera de valerse de práctica sy artimañas para desviar la atención hacia otro sitio, que no sea la del rendimiento de sus equipos, sucedió en el Chelsea, en el Inter, Real Madrid y ahora, nuevamente en el conjunto londinense, donde no está teniendo la mejor de las suertes y una debacle de resultados que para muchos, es motivo para plantearse su continuidad en el banquillo de los blues.
Ayer, en conferencia de prensa y después de haber sumado una nueva derrota en la temporada, respondió a las críticas diciendo que “Si me echan (del Chelsea) echarán al mejor técnico que ha tenido el Chelsea”.
Dicha afirmación no responde a cabalidad con lo que ha logrado él, ni es verdad absoluta, ni tampoco es una mentira a medias, pero si se compara con alguno de sus antecesores o predecesores, el punto negativo para Mou, sigue siendo la competición europea de clubes.
Antes que él, los hubo quienes SI lograron acceder a una final de Champions League, y otro más que SI logró la ansiada orejona, la máxima aspiración de Roman Abramovic cuando incursionó y revolucionó el mercado inglés con las estratosféricas sumas de dinero que gastó para hacer del Chelsea un equipo campeón, donde la Champions League es sin lugar a dudas, la joya de la corona a nivel de clubes.
No se puede negar que el legado de José Mourinho en el banquillo del Chelsea, ha dejado sus frutos y es considerado como el técnico más laureado de la historia blue, pero una de sus deudas sigue siendo la Champions, donde lo más lejos que llegó fue a semifinales, en las que cayó eliminado en ambas ocasiones por el Liverpool, en las temporadas 2004-2005 y 2006-2007, por lo que, sigue siendo un trofeo que se le resiste dirigiendo al Chelsea.
En su haber está la fría cantidad de títulos: 2 Premier, 2 League Cup, 1 FA Cup y 1 Community Shield, todo esto en su primer etapa que finalizó en 2007, desde entonces, lo ha intentado sin éxito, algo que si logró nuevamente dirigiendo al Inter en 2010.
Ahora, en su segunda etapa en el banquillo blue, desde el 2013, ha ganado una League Cup y una Premier, y obviamente, su mayor objetivo sigue siendo Europa, donde nunca ha llegado a una final con el Chelsea bajo su mando, algo que sí logró Avram Grant – y que perdió-; tampoco ganarla; Roberto Di Matteo si lo obtuvo, aún y a sabiendas que eran técnicos interinos.
En fin, la discordia en que si es mejor o no para el Chelsea, lo dictan los resultados, y a este momento pareciera que si lo es, aunque sigue pesando la enorme deuda europea, algo para lo que precisamente lo contrató el magnate ruso, para repetir los éxitos que obtuvo con el Porto y con el Inter, de ahí en más, puede ser que las horas del portugués estén contadas en Inglaterra por los malos resultados, ya que si de algo carece el Abramovic es paciencia.
TEHABLODEFUTBOL.COM