Quizá para muchos no sea la final más vistosa o la más llamativa, quizá porque no están “los de siempre”.
Curiosamente, en un torneo tan irregular y sorpresivo como lo ha sido este Clausura, llama la atención la desastrosa temporada que hicieron -y venían haciendo- UES, Firpo y Águila, de los tres, al menos los últimos dos, considerados “grandes” del fútbol nacional, fueron los que peor la pasaron jornada a jornada, a expensas de sacar buenos resultados y a esperas que la combinación de otros tantos les fueran dando los centavos necesarios para sumar en contra de la promoción a la segunda división.
De entre todos esos denominados grandes, hay que incluir al Alianza que también viene dando trompicones torneo a torneo y se queda a las puertas de confirmar su favoritismo y tan sólo es, una ilusión, mucho ruido y pocas nueces, y termina por fallar después de hacer inicios de torneos con buenos resultados.
Atlético Marte, que se encargó de dejar boquiabiertos a todos los entendidos en esto del fútbol el torneo anterior, terminó sucumbiendo estrepitosamente en el torneo que muchos esperaban fuera el de su explosión, y al menos lograra meterse en una final, el resultado fue muy diferente y terminó naufragando y muy lejos de la zona de clasificación.
FAS, quizá de todos, terminó siendo la gran decepción, marcó el ritmo durante todo el torneo y se ganó el título de favorito arrasar prácticamente con la mayoría de equipos, para luego, terminar derrotado y sin gas, sin ideas y con muy poco fútbol, ante Dragón.
Poco se puede decir del mitológico, pero lo cierto es que vía repechaje está a las puertas de ganar su tercer título nacional, el primero en torneos cortos, con un técnico que logró sacarle provecho a las ventajas e incluso a las desventajas que sabía que contaba, y con un puñado de jugadores que sueñan con levantar el trofeo ante el equipo que marca el paso en los últimos años, Metapán.
Quizá a Dragón le ha tocado bailar con la más fea, pero cierto es que, para ser campeón hay que ganar donde sea y a quién sea, y en ese sentido, el mitológico tiene las armas y tiene las ganas, esas mismas que los otros grandes tuvieron pero no utilizaron y tampoco aprovecharon, ante Metapán, no será un rival fácil y muy probablemente, para ganar deberá hacerlo mejor que como ante FAS.
El cuadro calero tiene oficio, desliegue espectacular de ofensiva y una sólida defensa y sobra decir que el oficio es una añadidura que le da ventaja, Metapán es experto en finales, es el vigente campeón y busca su segundo bicampeonato.
Se anticipa una final cerrada pero muy vistosa, y vuelvo a repetirlo, quizá para muchos no signifique la mejor de las finales, pero lo cierto es que están los que mejor hicieron las cosas, los que se emplearon para lograr los objetivos de la temporada. Eso, nadie tiene el derecho a discutirlo.
