“Más vale tarde que nunca” dice un viejo dicho. Pero que no suene a crítica, la verdad es que desde hace muchísimo tiempo, la apuesta por los jóvenes era una deuda con interés altísimo y saldos pendientes que existía en nuestro fútbol, como medida fundamental para lograr el desarrollo de los jóvenes que tanto se ha pedido a los clubes de la Primera División.
A partir del próximo 5 de abril dará inicio el torneo sub-17 que contará con la representación de los 10 equipos que conforman la liga mayor y a ellos se sumarán dos representaciones invitadas de las ADFA. Dicho torneo se jugará en 3 zonas: Occidental, Central y Oriental. El anuncio fue realizado por la dirigencia de la Federación Salvadoreña de Fútbol (FESFUT) y de la Primera División.
En lo que respecta a la zona Occidental queda conformada por C.D. FAS, Juventud Independiente, Metapán y ADFA Santa Ana; la zona Central, por Marte, Alianza Santa Tecla y la UES; mientras que la zona Oriental, por Águila, Firpo, Dragón y ADFA Usulután.
Esto es tan sólo el inicio de una nueva modalidad que seguramente potenciará los valores juveniles como base para el desarrollo de futbolistas que más temprano que tarde podrán tener la oportunidad de llegar al primer equipo. La apuesta en mi opinión, no debe suponer un riesgo, si no como una inversión a corto y mediano plazo, en la que los ganadores claramente serán los equipos, y consecuentemente los jugadores involucrados en este torneo. Es de sabidas cuentas, que la base para tener mejores resultados en todas las categorías y niveles en nuestro fútbol, era el desarrollo de juveniles y formarlos en el fútbol. Noticias como esta son refrescantes y permiten darse cuenta que el camino a seguir es este.