Tarde o temprano, las rachas, buenas o malas en el fútbol, llegan a su fin, y en el caso de los invictos, tampoco son eternos. Atlético Marte ha caído derrotado este día en la cancha del Estadio Universitario, ante la UES, que le propinó la única derrota del torneo regular, y de paso se quedó con el invicto del cuadro marciano, justamente en la jornada 18, la última que se jugaba y en el que los equipos disputaron sus encuentros pensando más en las semifinales o en cerrar de la mejor forma su participación en el Apertura.
Atlético Marte, que presentó variables en su once inicial, no pudo llegar a semifinales con el invicto en todo el torneo, y quizás a fuerza de ser sinceros, el haber perdido sea lo mejor que le haya podido suceder previo a la disputa del boleto a la gran final.
Dicen que hay partidos que es mejor perder en el torneo regular y no en semifinales, y mucho menos en una final, por ello el cuadro marciano tendrá una ventaja, si, y muy cómoda ventaja, se presentará a semifinales con el favoritismo que implica ser superlíder, pero no tendrá la presión que conlleva el haber llegado a semifinales – o llegar a la final en caso de clasificar- como líder invicto.
El contexto será diferente y sin ese factor, podrá tener la ventaja de encarar “desde cero” las semifinales, con la ilusión de llegar a una final en un torneo en el que han sido el mejor equipo, con el mejor nivel de juego y con una plantilla que se ha esmerado y que en cada partido ha demostrado la entrega por lograr ser un referente, que creo, en mi opinión, es el legado que el cuadro marciano ha gestado en este torneo, ser un ejemplo que cuando en nuestro fútbol se quieren hacer bien las cosas, tan sólo basta con saber elegir el tipo de jugador que se identifica con tu idea de juego, un técnico que conozca el fútbol local, con ideas frescas y renovadas, pero sobre todo, que se le permita hacer su trabajo sin interrupciones ni intromisiones estériles que lo único que hacen es desequilibrar y poner presiones sin sentido sobre los que deben sacar a flote los proyectos, los jugadores.
Marte, sigo creyendo, a pesar de la derrota, tiene todo para ser campeón y por ahora, solamente espera su rival que salga del desempate entre Metapán y Alianza.