Ha concluido la vuelta del repechaje y los equipos que lograron tener la ventaja en el encuentro de ida mantuvieron el resultado, a excepción de Francia que logró una espectacular remontada en Paris para obtener su boleto a Brasil, que por segunda vez esperó el último tren para lograr su clasificación, tal y como también sucediera para el Mundial de Sudáfrica en 201o.
Grecia que venció a Rumania en la ida por 3-1, rentabilizó su ventaja y aguantó los embates rumanos para terminar empatando 1-1 en el encuentro de vuelta y poder así lograr su boleto al Mundial, mientras, Rumania se quedó a las puertas de la cita mundialista, esa a la que no vuelven desde el Mundial de Francia 1998.
Portugal tuvo en Cristiano, la estrella del encuentro, quién exhibió su magnífico estado de forma y marcó un triplete para guiar a su selección a la gesta mundialista y de paso imponerse ante Suecia, que a pesar de un doblete de Zlatan Ibrahimovic, fue un auténtico vendaval y aprovechó que Suecia se quedó sin fuerzas para intentar la remontada.
El talento individual sostuvo a una Croacia que estuvo desde el minuto 38 con un futbolista menos, pero que venció con claridad a una timorata Islandia y aseguró su plaza en el Mundial de Brasil. Con los talentosos Ivan Rakitic y Luka Modric al mando, ayudados arriba por Ivica Olic y Mario Mandzukic, el partido fue durante gran parte de la primera mitad un monólogo croata. Los goles los marcaron Mario Mandzukic y Darijo Srna para vencer 2-0 a Islandia y lograr su clasificación.
México volvió a pasarle por encima a Nueva Zelanda, que poco y nada pudo hacer ante la superioridad de los mexicanos que se impusieron en su visita con un abultado marcador de 2-4, con un triplete de Oribe Peralta. La selección de México logró hacerle frente al ímpetu local para terminar imponiéndose y conseguir su pase al mundial.
Uruguay mantuvo su ventaja conseguida en la ida por 5-0 y en la vuelta jugada en Montevideo en un encuentro con poco brillo, y en el que se anticipaba una nueva goleada, no pasaron del empate sin goles ante una débil selección de Jordania que mostró muy poco para intentar cambiar el rumbo de la historia que comenzó a escribirse en el encuentro de ida.