Intenso y vertiginoso desde el primer minuto, el Barca volvió a ser lo que estamos acostumbrados a ver, dinámico en la transición del balón y efectivo en la combinación. Con ausencias notables en la titular para dosificar e ir pensando en el partido de vuelta ante el Real Madrid, salió desde el inicio del partido a demostrar que lo del Milan en Champions fue un accidente y una mala noche nada más, y que la crisis solamente cabe en la mente de los iluminados del fútbol que ya hablan de fin de ciclo por milésima ocasión.
El Barca tuvo serios problemas para encontrar el gol, antes lo hizo el Sevilla, encendiendo nuevamente las alarmas que sonaron y con fuerza en San Siro, el Sevilla a pesar de contar con muy poca posesión de balón encontró la ventaja. El Barca tuvo que esperar hasta la segunda mitad para equilibrar el marcador, lo hizo Villa, el 7 jugando de 9, tras un centro magistral colocado por Alves que le puso en bandeja el tanto que puso las cosas en su sitio. De ahí en mas el barca fue un monólogo al ataque, la entrada de Tello por Alexis le dio el oxígeno que necesitaba en ofensiva, encaró y abrió la banda, en una de esas descolgadas encontró a Messi por el centro quien con frialdad marcó el 2o gol, el de la tranquilidad, el que le daba la victoria transitoria.
Si algo se le puede reprochar al Barca en este partido es la poca tranquilidad para manejar el resultado, con el marcador en ventaja, el Sevilla fue mas peligroso, la mediacancha no existía, el juego se transformó en un ir y venir sin cuartel, el Barca cayó en el juego del Sevilla, algo que el Barca no acostumbra, pero que al final supo aplicarse en defensa y con la entrada de Busquets logró equilibrar el medio campo.
En definitiva, no fue uno de los partidos mas brillantes del Barca pero sirvió para recuperarse de la dura derrota en Champions, algo para lo que debe trabajar y mejorar mucho de cara a lo que se viene, el clásico de Copa y el de Liga ante el Real Madrid y la vuelta ante el Milan donde debe si o si, mostrar su mejor cara para poder seguir en carrera en todas las competiciones.