La selecta enfrenta su más dura prueba, ganar a Estados Unidos como visitante, en partido que medirán a estadounidenses y salvadoreños este sabado, en Salt Lake City, la selecta se juega su pase al Mundial, aunque en algún momento dije que el Sueño Mundialista se quedó en la almohada, pero las esperanzas del milagro aún permanecen intactas en la mente del pueblo salvadoreño.
Nos jugamos el todo por el todo, y la ilusión de clasificarse sigue latiendo en el corazón de los jugadores, y de toda una nación que se desvive, grita y llora por nuestra amada azúl y blanco.
Nuestros guerreros enfrentan su destino ante uno de los grandes de la Concacaf, ya no vale el “pudimos ganar en casa”, es a ganar o ganar, el empate no sirve, y la especulación de ayudas por otros resultados se desvanece, ahora es luchar por un objetivo: Clasificarse al Mundial o verlo por la televisión.