La selecta cuscatleca viajó a Trinidad y Tobago para tratar de conseguir los 3 puntos que lo pondría de vuelta en la lucha por conseguir un boleto para el Mundial de Sudáfrica, pero… los trinitarios definitivamente tenían otros planes.
Con un juego mediocre y falto de confianza en los primeros minutos por parte de la selecta, los caribeños se adelantaron en el marcador y con ésto las aspiraciones salvadoreñas se vinieron por el suelo.
Desordenados en todas las líneas, las diferencias físicas fueron factor clave para que nuestro equipo no lograra siquiera el empate, y el desacierto en la formación fue otro punto negativo desde mi punto de vista, alinear a jugadores que en los ultimos encuentros han venido mostrando carencias en lo defensivo y desconcentración en los momentos claves de los encuentros, el profe De Los Cobos, se la jugó y su movida no tuvo los resultados deseados, puesto que tuvo que modificar la alineación inicial en el medio tiempo dando entrada al volante ofensivo Arturo Alvarez, hijo de padres salvadoreños en Estados Unidos y que actualmente milita en el San José Earthquakes y que en mi opinión tuvo un rendimiento aceptable y se nota que el jugador tiene talento y buen fútbol, pero que haya sacado a Osael Romero es lo que menos me parece, sobre todo porque es un tipo que las lucha de todas, todas, y que muere con la camiseta puesta.
Pero es así, como ha sucedido durante toda la historia de nuestra selección y ante los arrebatos emocionales de nuestros medios deportivos al dar por ganado mucho terreno solo por el hecho de haberle ganado a México, es que suceden éstas cosas, si bien la mejoría en el equipo ha sido notoriamente satisfactoria, solamente fueron tres puntos, pero hay que ver que se perdieron 4 puntos jugando de local, en este momento daría igual haber perdido, pues de haber ganado los tres primeros encuentros como local estaríamos con 9 puntos en la tabla de calificación muy cerca de los mexicanos, ticos y gringos, pero la leche derramada quedó ahi al igual que nuestra selecta y la afición ni se diga.
En este momento creo que el sueño de ir al Mundial se quedó en la almohada pues como lo dije anteriormente si no se ganaba en Trinidad era mejor no hablar y mucho menos segui soñando.
Ahora a dormir, porque hay que ir pensando en el proximo mundial… si porqué no? en el 2014 tal vez entonces se hacen mejor las cosas de lo que hoy y los jugadores entonces ya tienen mucha más experiencias y sobre todo, los medios dejan de hablar tantas estupideces antes de jugar los partidos.