Este día Mauricio Funes inicia sus funciones como Presidente de la República de El Salvador, siendo el primer presidente de un partido de izquierda que gobernará nuestra nación, y de esta forma rompe la hegemonía impuesta por el partido de derecha que ya llevaba 4 períodos presidenciales en la dirección del país.
En un acto muy solemne acompañado de su familia y de diversos mandatarios de Centro y Sur América se dirigió a sus desde ahora gobernados con un discurso a mi criterio, sincero, honesto y lleno de rencor hacia los gobernantes pasados en el que criticó duramente los errores que éstos cometieron y que han llevado a nuestro país a encontrarse en este camino tan difícil y cuesta arriba y que solamente se podrá dirigir si las políticas del nuevo gobierno en el ámbito económico y social son las correctas.
Hace un llamado a la Unidad, si bien quedó demostrado en las elecciones pasadas, la fracción que existe entre los simpatizantes de izquierda y derecha, el nuevo presidente insiste en que nuestro país deberá mantenerse unido para lograr sobrellevar la crítica situación que se está viviendo, y pide el apoyo y la cooperación tanto de empresarios como de “ciudadanos comunes” para lograr que el país salga adelante todos de la mano.
El tema de la seguridad, es otro de vital importancia que se encuentra en agenda del nuevo presidente, ante el azote de la delincuencia que se vive en nuestro país, aseguró que trabajará día a día para disminuir y luchar contra los actos delincuenciales que son el pan de cada día y que aterran a los ciudadanos, e insiste en que la desvalorización moral que existe ahora, deberá ser contrarrestada a través de diversos planes y proyectos de carácter social y seguramente académicos dentro de las instituciones públicas y privadas para traer nuevamente los valores que parecen perdidos y que son la causa y el origen de la violencia que se vive en nuestra sociedad.
Los gastos del erario público son otro punto del cual habló en su discurso, criticando duramente a todos aquellos que han utilizado y mal orientado los recursos del Estado, haciéndolos propios y utilizándolos para fines que no son los previamente establecidos y atacó también a los empleados públicos que por compadrazgo o apellidos eligen a sus colaboradores y ayudantes para formar parte de los servidores que deben ejercer sus funciones en beneficio del pueblo y que no han sabido hacerlo hasta este momento, por ello mencionó que “se acabó el compadrazgo, y que el que haga méritos será justamente premiado pero el que se desvíe del ejercicio de sus funciones y se encuentre culpable será ejemplarmente castigado”, esto ultimo orientado a la corrupción que él manifestó existe en nuestro medio y que se origina desde algunos miembros o empleados del gobierno.
También enfatizó en los errores que los anteriores gobiernos han cometido a lo largo de estos 4 períodos que han estado en el poder, asegurando que el nuevo gobierno será claro, transparente y que el hecho de aliarse con algunos países con los que no existían vínculos comerciales ni diplomáticos, van encaminados a obtener beneficios que podrían ayudar a mejorar la situación económica y social que vive nuestro país, tomando como ejemplo los gobiernos del Presidente Lula da Silva de Brasil quien ha logrado establecer una economía sólida bajo un régimen izquierdista, y de quien asegura es un modelo digno de seguir por lo que el presidente Brasileño ha logrado, dejando a un lado las críticas y obstáculos que en su momento enfrentó.
Con respecto al tema de los subsidios, increpó duramente al gobierno anterior, quien fue el encargado de distribuir el dinero de los subsidios indiscriminadamente y a quienes menos lo merecían, asegurando que en este período, este tema será re-estudiado y ver la posibilidad de entregarlo a los sectores donde verdaderamente sea necesaria la entrega de los mismos, ya que manifestó que solamente las personas de la élite son las que se lucran de este dinero, en cambio el pueblo es el más perjudicado a raíz de la mala distribución y asignación de los mismos, entre ellos el subsidio al transporte, que ha sido el dolor de cabeza principal en la gestión anterior y quizás de los últimos años.
Asimismo, recordó a Monseñor Oscar Arnulfo Romero, quien fuera asesinado durante la guerra civil que vivió nuestro país, aseverando que él es su guía espiritual y que antes de haber llegado al Centro Internacional de Ferias y Convenciones donde se realizaría el traspaso del mando presidencial, asistió a visitar sus restos en la Catedral Metropolitana, como un homenaje y aseguró que ahora es un momento de construir nuevo gobierno y cumplir con lo que en campaña se planteó, un Gobierno de Cambio.